Capítulo Nueve

El grupo decidieron decidió acampar y descansar por la noche. Ramona durmió y soñó que estaba en casa otra vez. Ella estaba caminando a la iglesia. Pero entonces, de repente, nubes grises se reunieron y oscurecieron el sol. Ramona empezó a correr. Cuando Ramona llegó, vio que las llamas consumían su hogar. Ella vio a su padre tendido en el suelo. Ella se acercó a él, pero él estaba pálido y frío.
“¡Padre!” Ella gritó. “¡Por favor padre, levántate!”
“Él no despertará.” Una voz a su lado dijo. Ramona miró por encima y vio una joven de piel oscura y ojos verdes mirándola.
“¡NO!” Ramona gritó. “Obtenga ayuda!”
“Esto es solo un sueño.” La mujer dijo. “No puedes ayudarlo.”
Ramona miró a su padre y sabía que era verdad. “¿Quién eres tú?” Preguntó.
“Me llamo Valentina.”
Ramona no dijo nada. Ella miró a su padre y sintió un pesado dolor en su corazón.
“¿Por qué me has mostrado esto?”
“Pronto usted hará una elección. Esperamos tu decisión.”
Pero, antes de otra palabra se podría hablar, Ramona se despertó con lágrimas en los ojos.

Pobre Ramona 🙁